FOTO ARCHIVO. Sus inicios en el automovilismo con el Fiat 1500 de Carlos y Américo Grossi.
El 19 de enero de 2015, tuve la oportunidad de entrevistar por última vez a Carlos Alberto Reutemann, el piloto argentino con mayor cantidad de logros internacionales, particularmente en la Fórmula 1, donde obtuvo doce Grandes Premios, un subcampeonato mundial y tres veces fue tercero.
Compartí el encuentro, en el mediodía de aquel lunes con Roberto Elzener -en su oficina- y el recordado Edgardo "Tato" Piedrabuena.
Seguidamente, reproduzco el contenido de la nota publicada al día siguiente en el Diario LA OPINION, en esta ocasión, ilustrándola con fotografías de su excepcional campaña deportiva y de mi archivo personal.
Respetando el título original, como así también su contenido, repasamos la introducción y el diálogo que tuvimos con el piloto santafesino.
"Carlos Alberto Reutemann, sin duda uno de los integrantes del podio virtual, con Juan Manuel Fangio y José Froilán González, de los mejores pilotos argentinos de la historia, estuvo en Rafaela.
"Su visita respondió a cuestiones relacionadas con una operatoria comercial que realizó en Alpes Automotores SA, concesionaria oficial Renault en esta ciudad, donde adquirió una Duster que utilizará una de sus hijas, residente en la ciudad de Buenos Aires.
"Circunstancialmente, este periodista se dirigió hacia la empresa esa misma jornada para cumplimentar un trámite personal. El encuentro con el ex subcampeón mundial de Fórmula 1 dio lugar al compromiso de realizar una entrevista luego de la finalización de las gestiones que derivaron en la adquisición del vehículo.
"Tras sellarse el acuerdo, Reutemann aceptó, con total naturalidad y predisposición, la inquietud que le transmitimos: obtener algunas fotografías para enriquecer los albumes personales de sus acompañantes y también para ilustrar la nota que hoy publicamos. "Lole" se retrató junto a Raúl Pelletán, Roberto Elzener (ambos de Alpes) y Roberto Lorenzo.
"Respondiendo a lo convenido y en un privado de la empresa, Carlos dialogó, en un tono pleno de informalidad, con el periodista de LA OPINION.
"Repasó sus inicios en el automovilismo deportivo, hace cincuenta años, en Rafaela, con los hermanos Carlos y Américo Grossi, quienes le confiaron un Fiat 1500; y de la época dorada de la Fórmula 1, que lo tuvo como protagonista indiscutido.
"Pero también analizó, con una absoluta precisión conceptual, la actualidad del deporte motor, en una charla distendida y que siempre encontraba una nueva excusa para que siga enriqueciéndose hasta el momento de la despedida.
"Rafaela me marcó y siempre ocupará un lugar importante en mi vida; hoy, cuando entré a la ciudad me volví a sorprender, como me ocurre en cada oportunidad que vengo, ya sea por cuestiones personales o por algunos temas relacionados con mi gestión política; los rafaelinos, por vivir acá, quizás no tengan una idea bien clara de todo lo que le transmite esta ciudad al visitante; es sinceramente maravillosa y se observa, desde el momento que uno empieza a transitar sus calles, el crecimiento ordenado que ha tenido y que se refleja en una muy buena imagen, que no se ve con frecuencia en otras ciudades similares", expresó antes de dar paso a las preguntas, orientadas estrictamente a lo deportivo.
Después sí, el automovilismo ocupó el centro de la escena. Y el entrevistado, a partir de ese momento, se liberó. Tanto que, a lo largo de más de media hora, el diálogo, en varios pasajes, se transformó en monólogo. Como debe ser, cuando el interlocutor despliega todo su arsenal de conocimientos sobre los diferentes temas abordados.
- ¿Qué recordás de tus inicios en el automovilismo, hace cincuenta años, con la familia Grossi?
- ¿Cincuenta años pasaron?, ¡parece mentira!, pero siempre es bueno tener memoria para recordar los buenos momentos; sinceramente, tengo bien presente todo lo que vivimos con la familia Grossi, con Carlos y con Américo, con los muchachos del equipo, como Antonito Mele, Capella, Panigatti, Navitas, Sincovich, Lencioni y otros nombres que se me pueden escapar; fue una época muy linda y para mí era todo nuevo, tenía apenas 23 años y se me presentaba la oportunidad de correr a nivel nacional; el inicio fue realmente bueno y creo que superamos todas las expectativas con resultados que llegaron, seguramente, antes de lo previsto; siempre me acuerdo de la contención que me brindaron los Grossi, muchas veces, cuando venía a Rafaela, dormía en una pieza al lado del taller, sobre calle 25 de Mayo; no me voy a olvidar jamás de ninguno de esos nombres y de esas caras, porque me marcaron bien fuerte.
- Después, se dio el salto a las categorías más importantes en nuestro país, en las que abundaban las grandes figuras.
- Sí, había excelentes pilotos y tuve la suerte de correr prácticamente en todas; en Sport Prototipo con el Huayra; en Turismo Carretera con el Falcon angostado; y hasta en la Mecánica Argentina Fórmula 1 con un De Tomasso que tenía un motor Fiat 1500; con ese auto corrí en las 500 Millas Argentina de Rafaela contra los monstruos de cuatro litros, que me hacían viento cuando me pasaban en las rectas, pero la experiencia fue muy positiva y la pude aplicar después en los monopostos, cuando surgió la posibilidad de subirme a un Fórmula 2 Nacional del ACA, como instancia previa a mi viaje a Europa.
- No fueron sencillos tus comienzos en el Viejo Mundo.
- Seguro, pero nunca esquivé el sacrificio, porque estaba convencido que era la única forma de poder llegar a la Fórmula 1, que en un momento de mi vida, pasó a ser mi objetivo excluyente; en la F2 Europea, después de hacer una muy buena temporada, en la que fui subcampeón de Ronnie Peterson, surgieron las primeras opciones para seguir creciendo y tuve la suerte necesaria para aprovecharlas; creo que fue una muy buena época de la F1, con pilotos de gran nivel, con equipos poderosos y con espectáculos que respondían a lo que la gente quería ver.
- ¿Se puede comparar aquella F1 con la actual?
- Es muy difícil; la categoría tuvo varias épocas bien definidas. Una, en los años 50, con un piloto excepcional, como Juan Manuel Fangio; otra en los años que me tocó participar, donde no hubo un dominador contundente, pero sí grandes pilotos; después, podemos hablar de los tiempos de Ayrton (Senna) y Prost (Alain); de los años en los que dominó casi a voluntad Schumacher (Michael) y de la actual, que tiene como referente, al margen de lo ocurrido en la temporada pasada, a Sebastian Vettel.
FOTO ARCHIVO. Como piloto de la escudería italiana Ferrari logró adjudicarse cinco Grandes Premios.
- ¿Sigue teniendo el mismo atractivo la actual F1?
- En primer lugar y al margen de las consideraciones que uno pueda realizar, creo que es oportuno decir que sigue siendo la máxima expresión del automovilismo, como lo fue siempre; los últimos cambios que se realizaron en la categoría, entiendo que le restaron cierta atracción, especialmente porque el sonido de los autos no es el que la identificó desde su creación; le falta ese ruido tan especial que la hizo diferente y ese es un tema en el que se va a trabajar en el futuro para darle ese condimento que hoy reclama la gente.
- ¿Te sorprendió el dominio aplastante de Mercedes?
- De ninguna manera, porque cuando entraron en vigencia las modificaciones que se habían anunciado, Mercedes logró una mejor performance desde la primera carrera y después pudo sostener esa superioridad; tiene además dos muy buenos pilotos, no sé si son los mejores, pero sí se mostraron confiables durante todo el año; en 2015 no le resultará tan sencillo, pero de todos modos, el potencial que mostraron en el reciente campeonato, le permitirá encarar esta temporada con mucha tranquilidad.
- ¿Cuáles son a tu entender las razones por las que Argentina no tiene un piloto en la F1 desde hace varios años?
- Habría que buscarlas por el lado de la falta de presupuesto, pero también porque no existen categorías de monopostos que obliguen a los pilotos a manejar una potencia que hoy no ofrecen los autos de Fórmula en nuestro país; no tengo dudas que hay pilotos muy talentosos que por sus condiciones podrían haber participado en un buen nivel en la F1; en su momento Fontana (Norberto) llegó a correr, pero no encontró la continuidad que necesitaba para afirmarse; el caso más representativo, sin duda, es el de "Pechito" (José María López), que realizó un trabajo excepcional como tester de Renault en los años que logró sus dos campeonatos Fernando Alonso, y lamentablemente no pudo acceder a una butaca; estoy convencido que podría haber sido una figura importante en la F1, y si faltaba que demuestre algo más de todo lo que sabemos de él, se encargó de hacerlo en su regreso al automovilismo internacional con el equipo Citroën, en el WTCC.
- La última, ¿considerás que los autos eléctricos son el futuro del deporte motor?
- Es muy prematuro emitir una opinión con fundamentos concretos, porque disputaron pocas carreras; por el lado del medio ambiente, creo que es una opción válida y que debe aceptarse como tal, pero desde lo técnico y deportivo, por ahora, está muy lejos de lo que le gusta a los que siguen al automovilismo; el sonido de los motores es muy parecido a un silbido, algo que era impensado en los monopostos hasta que apareció esta Fórmula E; de todos modos, hay que darle crédito a quienes están tratando de imponer este proyecto, avalado por la mismísima FIA.