Juan Carlos Rizzuto fue uno de los tantos pilotos consagrados del automovilismo cordobés que alcanzó proyección nacional. Se destacó por sus excepcionales condiciones en la montaña, como la mayoría de sus comprovincianos, siendo un notable especialista en ese tipo de pruebas, desarrolladas en caminos serranos. Pero el “Negro” también exhibió su notable capacidad en la pista, logrando en cualquier tipo de escenarios resultados satisfactorios, que se pueden resumir en victorias, campeonatos y subcampeonatos.

Rizzuto falleció este miércoles, en la ciudad de Córdoba, en la que había nacido. Tenía 82 años y usaba una silla de ruedas desde 1980, cuando sufrió un grave accidente en el Gran Premio Rally Sierras de Córdoba. Las heridas recibidas en sus miembros inferiores le causaron una paraplejia, que lo inmovilizó hasta el último de sus días.

FOTO ARCHIVO. En una entrevista, acompañado por un trofeo y por una fotografía de su época dorada.

Su debut se produjo en la década del '60 con un Renault 1093 en el Campeonato Provincial, logrando dos subcampeonatos consecutivos en la Clase A, en los años 1968 y 1969, para obtener su primer título en 1970.

Posteriormente fue convocado por el recordado Alcides Raies -el padre de Gabriel- para sumarse a su equipo, consiguiendo varios triunfos con los diferentes modelos de la marca italiana Fiat, incluidos tres subcampeonatos argentinos, en las temporadas 1973 (con un IAVA) y en los años 1976 y 1978, para festejar su primer campeonato en 1980 (en todos los casos con un 125).

FOTO ARCHIVO. En la silla de ruedas que lo acompañó desde el grave accidente sufrido en el año 1980.

Este último año, el “Negro” sufrió un vuelco que le terminó ocasionando graves lesiones en su médula espinal, que lo postraron definitivamente y lo obligaron a bajarle el telón a su excelente campaña.

El accidente ocurrió en la noche del 24 de octubre de 1980, cuando Rizzuto, que era acompañado en esa carrera por Remo Capovilla, lamentablemente impactó contra un montículo de tierra con su Fiat 128 berlina.

Este miércoles, el recordado “Negro”, una persona que animaba cualquier reunión en la que estuviese, gracias a su inefable humor cordobés, recibió por última vez la bandera a cuadros, esa que tantas veces cayó rendida sobre la trompa de sus autos y que ahora volvió a flamear para despedirlo de este mundo.

Víctor Hugo Fux (Editor periodístico de Fierros Calientes).